| La protagonista podría descubrir que el mayor misterio no es el mundo oculto… sino su propia historia… |
Reseña de OTTOLINE Y EL VETERINARIO DE MONSTRUOS de Yann Apperry y publicada por Duomo Ediciones (2025) | Ep. 3×030
La novela OTTOLINE Y EL VETERINARIO DE MONSTRUOS, escrita por Yann Apperry y publicada en español por el sello Duomo Ediciones se presenta como una historia juvenil que combina fantasía, un particular tono gótico y un trasfondo emocional sorprendentemente profundo. Bajo una apariencia que recuerda al imaginario británico más clásico, aderezado con mansiones sombrías, criaturas insólitas y una heroína huérfana en busca de un lugar propio, el libro desarrolla una aventura donde la ternura y la oscuridad se entrelazan con gran habilidad.
La protagonista, Ottoline, reside en un castillo majestuoso que es más desconcertante que acogedor. Después de sufrir el fallecimiento de sus padres, queda al cuidado de un primo impredecible y tan extravagante como su tía, que es una persona obsesionada con el orden. La rutina asfixiante y la soledad caracterizan su vida cotidiana, en particular cuando se enfrenta a la posibilidad de pasar las vacaciones sola. No obstante, la aparición accidental de una criatura herido, que es un ser híbrido difícil de clasificar, provoca varios hallazgos que alteran el equilibrio de su mundo y marcan el comienzo de la aventura.
En su esfuerzo por rescatar al animal, Ottoline descubre la pista que le lleva hasta Arwanach, un veterinario especializado en monstruos que es, en realidad, su tío abuelo. Este se alejó de la familia debido a su profesión, la cual era considerada inapropiada. Esta reunión es un momento decisivo para el adulto y para la niña. Desde ese momento, Ottoline se convierte en su ayudante en horas nocturnas y descubre que los monstruos viajan entre su mundo y el nuestro en un intervalo horario muy específico. El gabinete veterinario, oscuro y lleno de criaturas tan fascinantes como peculiares, constituye uno de los escenarios más atractivos del libro, aunque su papel central se diluye a medida que la historia avanza hacia territorios más amplios y ambiciosos.
La elaboración de un bestiario extenso y original, complementado con ilustraciones y un índice final que posibilita al lector una exploración detallada de cada criatura, es uno de los puntos más notables de la novela. Podremos disfrutar de un colección de seres extravagantes que aportan a la trama misterio, humor y un interesante toque de pedagogía fantástica. Pero ojo, la novela no se limita simplemente al juego de la imaginación, sino que cada encuentro está acompañado de emociones, temores y revelaciones que van moldeando el desarrollo de la protagonista.
La valentía, la curiosidad y el ingenio de la protagonista son notables durante toda la narración, impulsándola a retar los límites que los adultos intentan establecerle, al mismo tiempo que busca descubrir la verdad acerca de su familia. Su temperamento obstinado la impulsa a tomar decisiones arriesgadas, las cuales no se reducen al mínimo, algo poco frecuente en la literatura juvenil. La obra presenta, de manera sutil, la forma en que las vivencias modifican a los personajes y generan huellas reales, tratando temas como el duelo, el trauma y la resiliencia sin ser condescendiente.
Arwanach, en cambio, es un personaje entrañable debido a su excentricidad. Una de las líneas emocionales centrales del libro es su vínculo con Ottoline y es que entre ellos se establece un lazo que pasa por el dolor compartido, la mutua revelación y el anhelo de reparar, de alguna manera, las fracturas pasadas. La novela no duda en mostrar su vulnerabilidad y sus secretos, que acaban siendo decisivos para el desenlace.
Aunque el comienzo puede ser un poco lento, la historia combina pasajes inquietantes con momentos de humor absurdo y se vuelve particularmente ágil y sorprendente en su parte final. El cambio hacia la exploración de un segundo mundo, que se puede acceder mediante un túnel escondido, extiende la mitología del libro y proporciona una atmósfera más fantástica. Sin embargo, este giro podría parecer un desvío con respecto a lo prometido como eje central de la narración, que no es otro que el gabinete veterinario.
En términos generales, OTTOLINE Y EL VETERINARIO DE MONSTRUOS es una novela que destaca por su sensibilidad e imaginación. Brinda una aventura llena de criaturas inverosímiles, un enfoque maduro de los sentimientos y una heroína cuyo valor deja huella, aunque no siempre conserve un ritmo constante y algunos elementos prometedores queden en segundo plano. Es una lectura perfecta para los jóvenes que son apasionados de mundos fantásticos, historias familiares complejas y monstruos que, en ocasiones, nos dan más lecciones que los propios seres humanos.
Muchas gracias al sello Duomo Ediciones por facilitarme un ejemplar de prensa para que os comente mis impresiones, absolutamente sinceras, sobre la novela.
NOTA FINAL: 3/5
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